Un día en la travesía comienza entre las 3 o 4 de la mañana. Una persona del grupo es designada para levantarse temprano y calentar agua en el trangia, que será para el desayuno, que en la travesía consiste en avena preparada con diferentes ingredientes como miel, crema de cacahuate, leche condensada, entre otros. Después del desayuno, todos empiezan a empacar y prepararse para caminar.

El día comienza muy temprano para aprovechar y caminar cuando el clima está más fresco y evitar el sol. Durante el día, un voluntario es designado como el líder del día y es responsable del grupo, asegurándose de que todos estén bien, bebiendo suficiente agua y verificando si alguien necesita ayuda. Otro papel importante durante el día es el del navegante, ya que la travesía se autonavega. Esta persona se encargará de revisar los mapas, el GPS y la tarjeta de ruta para guiar al grupo por el camino correcto y asegurarse de que lleguen a su destino. Hacemos esto para mejorar y desarrollar las habilidades de liderazgo de los jóvenes y prepararlos para ser líderes en el futuro.